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De forma inevitable, el verano se acerca cada vez más, y con él también lo hace la habitual subida de temperatura que tan mal le sienta a nuestros ordenadores. Obviamente, el contar con un buen sistema de refrigeración en el PC ayuda a mitigar el calor y que los componentes sufran menos, pero como te vamos a contar en este artículo, hay algunos aspectos extra que, si los tienes en cuenta, también colaborarán para evitar que la temperatura afecte demasiado a tu PC, y con ello también a su longevidad e incluso su rendimiento.

Sí, hemos dicho rendimiento, y es que es bien sabido que casi todos los componentes del PC cuentan con un sistema de protección llamado Thermal Throttling, que consiste en que cuando llegan a cierto umbral de temperatura reducen su velocidad de funcionamiento (y con ello su rendimiento) para preservar su integridad. Por eso, entre otras cosas, es muy importante estar atento a la temperatura de los componentes del PC.

Dónde colocar el PC para que no le suba la temperatura

Dado que la temperatura ambiente afecta mucho a la temperatura de funcionamiento y al ruido que hace el PC (ten en cuenta que, a mayor temperatura, los ventiladores PWM funcionan más rápido y por lo tanto también emiten más ruido), el lugar en el que colocas el ordenador puede llegar a ser primordial. Incluso aunque tengas aire acondicionado en la habitación, hay poco que podamos hacer para paliar la temperatura ambiente, pero colocar la torre del PC en un lugar estratégico sí que es algo que está en nuestra mano.

Si tu escritorio tiene un tamaño considerable, es bastante normal el tener la caja del PC a la derecha o a la izquierda, en el borde de la mesa; sin embargo, los muebles para ordenador como el que te mostramos en la imagen de arriba también son bastante frecuentes, especialmente para personas que no tienen demasiado espacio en la habitación, y como podéis ver la caja del PC está enclaustrada en el mueble, en la parte de abajo… mala idea.

Es una mala idea por dos motivos: el primero de ellos es que al estar la caja enclaustrada, casi seguro que se formarán burbujas de aire caliente, especialmente en la parte trasera (si tienes el PC colocado así, mete la mano en el hueco por detrás y notarás que está muy caliente), haciendo que el aire que le entra al PC esté caliente en lugar de fresco, fomentando que la temperatura se dispare. El segundo motivo es que tampoco le llegan las corrientes de aire que pueda haber en la habitación al estar colocado tan abajo.

Lo ideal es que el PC esté colocado encima de la mesa del escritorio, y si no te es posible por espacio, que utilices un mueble auxiliar para colocarlo pero siempre evita que quede enclaustrado, ya que eso es fatídico para la temperatura. Si tienes la oportunidad, el mejor resultado sería colocar la caja del PC de manera que su parte delantera (por donde entra el aire) quede en medio de donde se formen las corrientes de aire en la habitación, sea al abrir la ventana, cuando usas un ventilador o cuando enciendes el aire acondicionado; el caso es procurar que el aire que le entre al PC siempre sea fresco.

Eso sí, ten en cuenta otra cosa y es que si colocas el PC al lado de una ventana, como te mostramos en la imagen de arriba, también tenderá a entrar más polvo en su interior, así que es recomendable asegurarse tanto de tener filtros anti polvo para evitar que se deposite en su interior como de realizar limpiezas regularmente.

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