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Fue a principios de año cuando Eben Upton, CEO de Raspberry Pi Foundation hablaba sobre sus famosas SBC. Entonces, principalmente hablaba sobre el restablecimiento del stock de la Raspberry Pi 4 que llegó, en su modelo de 8 GB, llegar a costar 200 euros. También hablo de la Raspberry Pi 5 de pasada, para decir que podría llegar el próximo año, pero, ¿cómo debería de ser?
Si eres un poco aficionado a la tecnología, has oído hablar de las Raspberry Pi. Estas SBC (Single Board Computer) se han hecho muy populares por su precio ajustado y gran potencia. Una popularidad que ha hecho que proliferen los imitadores.
La pandemia de la COVID ha impactado fuertemente en estos ordenadores de bolsillo. Durante meses el stock ha sido bajísimo y han llegado a duplicar precios. Por suerte, parece que el stock remonta y el precio se está normalizando.
¿Qué esperamos de la Raspberry Pi 5?
Bueno, lo primero, una fecha. Teóricamente debería haber salido al mercado el pasado año. Luego surgieron rumores que saldría este año y a principios de año ya se hablaba de 2024, como pronto. Hace falta, ya que la Raspberry Pi 4 se ha quedado un tanto obsoleta y hay modelos superiores en el mercado.
El primer gran reto de la Pi 5 es mejorar la potencia del procesador. Algo bastante viable sería usar un procesador de arquitectura ARM con 4 núcleos de potencia que lleguen a los 2 GHz y se complementen con 2 núcleos de eficiencia. Sería una buena combinación que permitiría un gran salto de rendimiento.
Uno de los puntos críticos está en la cantidad de memoria RAM. No tiene sentido lanzar actualmente modelos con 1 GB y 2 GB de memoria RAM. Lo más probable es que el modelo básico tenga 4 GB de RAM, veamos un modelo intermedio con 8 GB y un modelo tope de 16 GB. Al menos, esto es lo que esperamos y deseamos, para poder usarlo como ordenador personal.
No debería renunciar al lector de tarjetas, pero debería agregar un socket M.2 para SSD. Empieza a ser necesario la integración de este conector en las Raspberry Pi, sobre todo, por el precio de estas unidades de almacenamiento. Aunque sea solo PCIe 3.0, ya dará mucho mejor rendimiento que conectar un SSD SATA por USB, como muchos venían haciendo.
Igual esto es más complicado, pero, que bonito sería tener un USB-C con Alt Mode (compatible con DisplayPort). Esto abriría las posibilidades de uso de esta SBC de una manera brutal.
Algo que también sería interesante es que soportará WiFi 6 y Bluetooth 5.2. Lo más normal es que ya soporte estos estándares en la próxima versión.
Pero, algo así ya existe
Lo interesante de todo esto es que tenemos la Orange Pi 5 que cumple con prácticamente todo lo indicado. Esta placa tiene un procesador de 8 núcleos de arquitectura ARM y 16 GB de memoria RAM. También incluye un socket M.2 SSD para instalar una unidad de almacenamiento de formato 2230. Integra también un puerto USB-C, eso sí, sin soporte Alt Mode.
Todo esto es la Orange Pi 5 16 GB que cuesta 137 euros, prácticamente lo mismo que la Raspberry Pi 4. Se hace necesaria una actualización de la placa SBC más conocida del mundo, sin lugar a dudas.
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