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Una empresa de Estados Unidos descubrió que el sistema automático de la plataforma estaba publicando avisos en localizaciones a las que ya no hacía envíos. Más de USD 200 mil podrían haberse perdido de esta manera.

En ocasiones es posible buscar un producto, encontrar que es justo lo que uno quería, solo para descubrir luego que por una cuestión de geografía y distribución no está realmente disponible. En esos casos el perjuicio será equivalente al tiempo perdido.

La situación se complica cuando el producto le llega al usuario de una plataforma a través de un aviso. Para el usuario la situación no cambia mucho, pero la empresa tiene que pagar por la publicidad. Al parecer Amazon ha cometido este pequeño error en varias ocasiones. Ha ofrecido productos a personas que realmente no podía comprarlos.

Una diferencia importante

El caso más conocido es el de una empresa del estado de Virginia dedicada a la distribución de componentes para computadoras para videojuegos. Hace un tiempo, debido a las leyes de consumo de energía de California dejó de realizar envíos a dicho estado.

El sistema automatizado de Amazon siguió publicando los avisos en esta localización, a pesar de que los productos no pueden comprarse. Como consecuencia de los costos sin retorno la empresa no obtuvo ganancias durante noviembre, diciembre y enero.

El dueño de la empresa, Rob Robinson, notificó a la compañía de lo ocurrido en noviembre. Sin embargo, la primera respuesta de Amazon fue negar cualquier tipo de problema. Solo después de que el incidente llegara a los medios reconoció el error.

La compañía estima que entre USD 200 mil y 300 mil fueron malgastados. Amazon afirma que la cantidad de avisos enfocados en la región ha sido menor y ha ofrecido unos USD 15 mil.

Problema de diseño

El problema con la publicidad en Amazon parece estar en su diseño. Primero, no tiene una opción de localización geográfica avanzada. Segundo, no tiene un mecanismo que compruebe si los productos que le presenta a los usuarios pueden ser enviados a sus regiones.

El caso de Robinson es impactante, pero difícil estimar cuanto habrán gastado tantas otras empresas en publicidad inútil.

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