Por defecto varios datos de los usuarios son empleados para el entrenamiento de los modelos. El contenido queda fuera, salvo que se autorice al habilitar las opciones de IA del servicio.
Una de las problemáticas más importantes en el desarrollo de los modelos de inteligencia artificial es la construcción de las bases de datos para el entrenamiento. En los últimos meses hemos visto varios conflictos producirse por una recolección indiscriminada de datos desde diversos espacios de Internet, así como políticas poco claras sobre el uso de la información de los usuarios.
Hace unos días Zoom aclaró su política en sus términos de servicio.
Derechos
La compañía se reserva el derecho de utilizar algunos de los datos de sus usuarios para el entrenamiento de sus IA o modelos de aprendizaje automatizado. Datos de uso de producto, telemetría e información de diagnóstico entre otros aspectos. No existe opción para evitar esta recolección.
En teoría ni los mensajes, ni los archivos de documento, ni los audios y los videos de los usuarios serán empleados para el entrenamiento. Salvo que el usuarios de su consentimiento.
Zoom tiene dos opciones de generación de contenido por IA. Uno de ellos permite crear resúmenes de los encuentros y otro crear mensajes de chat. Cuando el usuario habilita estas alternativas debe primero otorgar una aprobación de términos de uso. En ese momento establece un permiso para que Zoom utilice el contenido que genera para el entrenamiento de su IA.