Una de las ventajas de tener un PC gaming y al mismo tiempo una consola Xbox One es que el mando es compatible con ambos. Sin embargo, y especialmente si sueles utilizarlo en uno y otro sistema, muchas veces da problemas de sincronización. Si es tu caso, a continuación te vamos a enseñar cómo solucionarlo y «obligar» al mando de Xbox One a sincronizarse correctamente tanto con el PC